La palabra «horizonte» proviene del latín horizontem, que a su vez deriva del griego antiguo horizōn kyklos (ὁρίζων κύκλος), que significa «círculo que delimita» o «límite». En su esencia, hace referencia a la línea aparente donde el cielo se encuentra con la tierra o el mar, un punto que, aunque parece inalcanzable, nos guía hacia adelante con la promesa de lo que está por venir.

En el contexto de SOLIMSA y su propósito para 2025, el «horizonte» no solo simboliza un límite que delimita lo visible, sino una invitación a mirar más allá, a explorar  y alcanzar nuevos propósitos. Es una metáfora perfecta para una empresa que ha demostrado ser pionera en innovación, liderazgo y sostenibilidad.

El HORIZONTE, como concepto, también habla de progreso. Cada vez que avanzamos, esa línea se desplaza, llevándonos a nuevas metas. Para SOLIMSA, el horizonte es más que un destino; es un recordatorio de que el crecimiento y la mejora continua son parte del viaje. Representa el compromiso de seguir transformando la industria de la impresión, de liderar con visión y de extender el impacto más allá de lo esperado.

Desde su origen etimológico, «HORIZONTE» lleva implícito el acto de definir, de trazar un camino claro. De ahí nuestro reto de continuar siendo una guía para los clientes y un referente en el mercado gráfico, siempre explorando nuevas formas de innovar y de ser ejemplo de excelencia.

Así como el horizonte en la naturaleza nos motiva a caminar hacia el infinito, para nosotros representa la determinación de superar desafíos, de soñar en grande y de transformar límites en nuevas oportunidades para los colaboradores más comprometidos con el porvenir. 

Es por ello que hemos escogido este concepto,  cargado de posibilidades, y en este nuevo año, se convierte en el núcleo que impulsa la visión y el propósito de la empresa.

¡Acompáñanos, trazemos el futuro!